Las pruebas médicas que tendrás durante el embarazo
El embarazo es un periodo en el que se suelen realizar una gran variedad de pruebas. Sin embargo, es muy fácil perderse a la hora de saber exactamente para qué debe hacerse las pruebas.
También puede ser estresante no saber adónde ir, con qué frecuencia hacer las pruebas y cómo prepararse para ellas. Intentamos responder a estas inquietudes y presentamos un calendario de exámenes semana a semana.
Pruebas básicas para embarazadas
El primer examen básico para las mujeres embarazadas es una visita al ginecólogo, que hará un historial completo y recogerá información sobre las enfermedades de la madre y los medicamentos que toma. Se supone que dicha visita debe tener lugar como máximo hasta la décima semana de embarazo, pero, por supuesto, cuanto antes mejor. Muchas mujeres consiguen acudir al médico ya entre la sexta y la octava semana de embarazo.
Para confirmar el embarazo, el ginecólogo realiza una ecografía y una exploración ginecológica estándar. Si aún no es posible confirmar el embarazo, el médico pide análisis de sangre o volver dentro de una semana.
Si el embarazo se confirma con éxito, el médico crea una tarjeta de embarazo. El ginecólogo también realiza inmediatamente una citología, que debe hacerse antes de la décima semana de embarazo.
Primeros exámenes durante el embarazo
▶️ Las primeras pruebas básicas que deben realizarse durante el embarazo son:
✔️ Hemograma ampliado
Se realiza un hemograma al menos 5 veces a lo largo del embarazo en diferentes etapas. Es una de las pruebas más fundamentales durante este periodo que no debe descuidarse.
A través de la morfología es posible detectar enfermedades que pueden afectar a la salud de la madre y del feto. Las pruebas deben ser interpretadas por el médico.
✔️ Análisis de orina
Analisis se realiza una vez al mes. Un análisis de orina no es difícil de realizar y puede decirle mucho sobre el estado de su organismo. La orina se pasa a un recipiente diseñado para ello y luego se evalúa en el laboratorio. La prueba se realiza con más frecuencia si hay síntomas que indiquen una enfermedad del aparato urinario.
✔️ Determinación del grupo sanguíneo y del factor Rh
Grupo sanguíneo dará información a los médicos sobre la sangre que debe administrarse en caso de que sea necesario salvar a la madre. También es útil para evaluar el riesgo de conflicto serológico.
✔️ La concentración de anticuerpos anti-Rh –
Ayudará a excluir o confirmar un conflicto serológico. Esta prueba se realiza hasta tres veces durante el embarazo, en función del factor Rh de la madre.
✔️ Concentración de glucosa: al menos dos veces durante el embarazo
Permite detectar la presencia de diabetes gestacional, que puede ser peligrosa tanto para la madre como para el feto. En la madre, puede causar problemas de tensión arterial, preeclampsia y problemas urinarios.
En el caso del feto, puede provocar una serie de enfermedades y anomalías en el desarrollo de diversos sistemas e incluso el aborto espontáneo.
✔️ Pruebas de detección de enfermedades infecciosas como el VIH y el VHC
Destinadas a prevenir la transmisión de estas enfermedades al bebé si se detectan en la madre. Se realizan hasta dos veces durante el embarazo.
✔️ Pruebas de toxoplasmosis, citomegalovirus, sífilis o rubéola: el kit TORCH
Permite al médico evaluar el riesgo al que están expuestos tanto la madre como el bebé y prevenir en la medida de lo posible las complicaciones de estas enfermedades.
Algunas de las enfermedades que se detectan con este kit son completamente asintomáticas, por lo que merece la pena prestar especial atención a estas pruebas. Se realizan dos veces.
Análisis de sangre durante el embarazo
Los análisis de sangre durante el embarazo se realizan regularmente cada pocas semanas, al igual que el análisis de orina, que, sin embargo, se realiza con algo más de frecuencia. Otras pruebas a las que debe someterse una mujer embarazada son una revisión dental y una visita a cualquier especialista bajo cuyo cuidado se encuentre.
También conviene comprobar que la glándula tiroides funciona correctamente. Para ello, basta con pruebas como TSH, FT3 y FT4, y si se observan anomalías en sus resultados, el médico solicitará diagnósticos adicionales.
Las pruebas adicionales que algunos recomiendan son también los niveles de hierro, vitamina B12 y ácido fólico. Sin embargo, no son obligatorios.
Ácido fólico en el embarazo
En principio, la toma de ácido fólico durante el embarazo se recomienda a todas las mujeres, pero lo mejor es adaptar la suplementación con ácido fólico a cada caso concreto en función de las pruebas previas y la consulta médica.
La influencia del ácido fólico en el desarrollo del bebé es crucial: su deficiencia puede estar relacionada con la formación anormal del tubo neural, el paladar hendido o defectos cardíacos.
Dado que el tubo neural se forma entre la 4ª y la 8ª semana de embarazo, se recomienda la administración de suplementos de ácido fólico a todas las mujeres en edad fértil o que planeen quedarse embarazadas. Su consumo reduce el riesgo de defectos del tubo neural en más de un 70%.
El ácido fólico también interviene en la formación de los órganos del niño o en el código del ADN. Se deben tomar suplementos de ácido fólico, ya que su carencia puede ser mortal.
Es posible, pero arriesgado, confiar únicamente en las fuentes dietéticas de ácido fólico, ya que a éste no le gusta el tratamiento térmico. Hasta el 80% del ácido fólico de los alimentos puede perderse durante el tratamiento térmico. El almacenamiento prolongado de alimentos también afecta negativamente a su disponibilidad en los alimentos.
Pruebas prenatales en el embarazo – Prueba PAPP-A
La prueba prenatal que se realiza con más frecuencia en el embarazo es la prueba PAPP-A, que permite evaluar si el bebé está afectado por el síndrome de Down, el síndrome de Edwards o el síndrome de Patau, por ejemplo.
A partir de esta prueba, es posible detectar la mayoría de los casos de síndrome de Down, evaluar el riesgo de su presencia o excluir estas enfermedades.
Entre las pruebas prenatales básicas, también se realizan con frecuencia la prueba NIFTY o las pruebas AFP y hCG, que al igual que la prueba PAPP-A- tienen por objeto confirmar o descartar determinadas anomalías fetales o determinar el riesgo de que se produzcan.
Estas pruebas son exámenes fetales no invasivos, es decir, exámenes que se realizan mediante ecografía o extrayendo sangre de la madre como en un análisis de sangre normal.
Pruebas prenatales invasivas
Las pruebas prenatales invasivas sólo suelen solicitarse cuando existe un riesgo razonable de anomalía fetal. Consisten en tomar muestras de los alrededores de la placenta o del propio feto.
Se realizan perforando el abdomen de la madre con una aguja. Son muy eficaces y permiten determinar con una certeza de casi el 100% la presencia de un síndrome. Detectan afecciones como el síndrome de Edwards, Down, Patau, Turner o Di George, entre otras.
Estas pruebas incluyen, por ejemplo, la amniocentesis, la biopsia de trofoblastos y la cordocentesis.
¿Cómo son las pruebas prenatales invasivas?
La amniocentesis consiste en pinchar la bolsa amniótica con una aguja y recoger líquido amniótico. El examen se realiza bajo control ecográfico para que el médico pueda ver exactamente dónde se está introduciendo. El pinchazo no es especialmente profundo.
La biopsia de trofoblastos, también conocida como biopsia de vellosidades coriónicas, consiste en la recogida de tejido para realizar un examen citogenético con el fin de identificar determinados defectos fetales.
El riesgo de aborto espontáneo tanto para la amniocentesis como para la biopsia de vellosidades coriónicas es del orden del 2-3%.
Exámenes de embarazo – calendario
▶️ En resumen, el calendario de pruebas durante el embarazo debería ser el siguiente:
✔️ Hasta la 10ª semana de embarazo
Hemograma con análisis de orina, análisis del grupo sanguíneo y del factor Rh, niveles de glucosa, citología, exploración ginecológica, ecografía, análisis de enfermedades infecciosas, análisis del pH vaginal, análisis de anticuerpos inmunitarios.
✔️ Exámenes de la 11ª semana a la 14ª semana
Ecografía realizada por un ginecólogo, tanto transabdominal como vaginal, examen ginecológico, prueba PAPP-A, análisis de orina.
✔️ Pruebas entre la 15ª y la 20ª semana
Otra prueba de toxoplasmosis, análisis de orina, examen ginecológico, ecografía.
✔️ Pruebas entre las semanas 21 y 32 de embarazo
Glucemia y hemograma, prueba de anticuerpos inmunitarios, análisis de orina, prueba ginecológica y ecografía.
✔️ Entre las semanas 33 y 38 de embarazo
Posibilidad de repetir la prueba del VIH, morfología dilatada, análisis de orina, prueba de anticuerpos inmunitarios y antígeno HBs, prueba de sífilis, KTG.
✔️ Exámenes en torno a la semana 40 de embarazo
examen obstétrico, evaluación de la actividad fetal, ecografía, KTG, morfología, análisis de orina.
Además, todo el tiempo, en cada uno de los periodos mencionados, medimos el peso y la tensión arterial.
Si la madre padece enfermedades crónicas o cualquier otra dolencia, debe estar bajo el cuidado constante de un especialista y someterse regularmente a todas las pruebas que éste ordene. La información sobre la enfermedad debe incluirse en el historial del embarazo.
Además, si alguno de los exámenes mencionados sugiere anomalías en el curso del embarazo o en la salud de la madre, se ordenará su repetición o el médico recomendará exámenes adicionales.